15 marzo 2012

Gonna get over you

Decir adiós es difícil, y más cuando no se quiere, pero a veces, sólo a veces, eso es bueno.
Millones de posibilidades por ver, por vivir y por sentir se muestran a tu disposición.
Comerte el mundo a pesar de las dificultades que te presenta el mundo día a día, ser fuerte, sonreír y no callar.
No hagas caso de aquel que te hace daño, el que, te dice que te quiere, pero no le gusta como eres.
¿Qué estás loco?, ¿y?, así has nacido, nadie puede decirte que es lo que tienes y no que hacer.
Quiérete por una santa vez, ¿qué importa pesar un kilo más o uno menos?, ¿no eres rubia y no te gusta?, ¿tienes los ojos azules y te aburre?, ignóralo todo.
Algún día te darás cuenta de lo que ahora, una humilde servidora, que nada es perfecto porque tú no quieres, que puedes sonreír a pesar de todo lo que te pase.
Vive, aunque sea duro, disfruta de lo que puedas, siempre habrá momento malos, pero el pequeño truco, está en saber sobrellevarlos.
Pero para ello, pequeña princesa, sólo te daré un consejo, no creas que estamos en un cuento de hadas, esto es la vida real, así que, deja de esperar al príncipe azul que te salvará del malvado caballero, porque en ocasiones, el príncipe destiñe, y el caballero sólo trataba de ayudarte.
Comienza a hacer las cosas por ti, se egoísta, sueña con todo lo que siempre has querido, que nadie te frene, que nadie te diga que no puedes, porque si, si puedes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario